Los cascos antibalas absorben y dispersan la energía de las balas o fragmentos entrantes mediante materiales avanzados:
Absorción de energía: Las fibras de alta resistencia (como Kevlar o UHMWPE) se deforman al impactar, ralentizando y atrapando el proyectil.
Construcción en capas: varias capas de material trabajan juntas para distribuir la fuerza, reduciendo el traumatismo para el usuario.
Geometría de la carcasa: la forma curva del casco ayuda a desviar las balas y los escombros de la cabeza.
Hora de publicación: 30 de abril de 2025